Nunca tendrás una segunda oportunidad de causar una buena primera impresión.
ADVERTENCIA: En esta página web no vas a encontrar referencias de precios. Si eso es lo que vienes a buscar, te ahorramos el paseo. Ponte en contacto con nosotros enviando un email. Veremos qué se puede hacer.
SEGUNDA ADVERTENCIA: Las imágenes de las cartas han sido creadas por IA. Las fotos no, ni la de la nieve en el monte, ni la del basket. Eso son fotografías de verdad. Si la WEB no te gusta, la culpa es sólo mía, que la hice a ratos en vez de contratar a un profesional. Como dice el refrán: consejos vendo, que para mi no tengo
Esta es la última página de la web que he hecho.
Me parecía que faltaba algo. Pensé en alguna foto chula, algo de tipo técnico, al fin y al cabo es a lo que estamos.
Y, de repente, me di cuenta de que lo que faltaba eras tú.
Y eso es imperdonable
Se supone, que esta es la primera página que vas a ver tú, porque así está configurada esta web.
Así que terminé, compartí el enlace con algunos amigos, y algunos enemigos también, les pedí su opinión y nadie me dijo que la web no se dirigía explícitamente a ellos.
Tampoco que sí lo hacía.
Y eso no es bueno.
Leyeron, hicieron la digestión de lo que leían y…nada. Ninguno se sintió llamado a ponerse en contacto para rebajar el precio de compra de sus gases.
Esa es una mala noticia:
—¿Te gusta la web?
—Nostamal
—¿Tú me contratarías?
—No sé yo si yo…
Pues entonces la web es una mierda.
¿A que tengo razón?
El único objetivo de esta web es provocar la emoción de potenciales clientes.
Sin emoción no hay cliente.
No hay más. Si no conseguimos eso, la página será triste. Punto.
Por eso, hemos querido añadir algo más.
Eres un profesional de las compras, un gerente o un dueño de negocio y quieres, necesitas hacer alguna inversión sin sentir que estás dilapidando el futuro de tu empresa.
Necesitas nueva maquinaria, un transporte más eficiente y menos contaminante, un nuevo edificio para tus actividades, lo que sea, pero algo quieres y además, cuesta dinero.
¿Y de dónde va a salir ese dinero que necesitas?
¿Más créditos?
No, la deuda no la puedes aumentar.
¿Despidos?
Anda, no seas gñññññññiuuuuuggggggrrrrrrrrrrrrrrrrrrr….
¿Consiguiendo ahorros?
No te ves capaz. Llevas un tiempo ajustando y apretando a todos tus proveedores con la idea de optimizar el gasto. Incluso has hablado con tu proveedor de gases. ¿Qué te voy a aportar yo que tú no hayas conseguido?
Esto te interesa:
Si no te da vértigo ni vergüenza ponerte en manos de alguien que es más joven que tú y que sabe de esto mucho más que tú, es posible (no digo seguro, ni siquiera probable) que ese dinero que necesitas para crecer pueda salir de lo que te ahorrarás en la compra de gases.
¿Tanto dinero gastamos en gases? Te estarás preguntando.
No lo sé. Dímelo tú y lo sabré.
Tardaré muy poco en decirte cuánto es tu ahorro potencial.
A partir de ahí, tú decides.
Como siempre.
Aquí siempre decides tú.
No serías el primero que me dice que esto ya lo ha oído antes y que incluso contrató a alguien para esto mismo y no lo hizo bien.
Tampoco serías el primero en no castigarme a mí por lo que otros hayan podido hacer mal.
Ni serías el primero en olvidarte de aquello y no castigarte a ti mismo.
Date otra oportunidad
No le des muchas vueltas, deja que se las demos nosotros.
Sólo por saber si estás comprando a buen precio lo que sea que compres, te encantará conocernos. Luego, lo demás caerá por su peso.
Aquí
SI GAStas 100, nosotros te ayudamos a GAStar solo 50
¿Cuándo fue la última vez que conseguiste que tu proveedor de gases te bajara el precio?
¿Lo recuerdas?
¿O eres de los que nunca han logrado tal azaña? De esos que piensan que no se puede negociar con su proveedor de gases para que le mejore las condiciones de compra.
Si eres de los primeros, y han pasado más de 10 años de tan magno evento, te ayudaremos a traerlo a tu memoria.
Si eres de los segundos, podemos ayudarte a que rompas la racha.
Hace unas semanas tuve una curiosa conversación
No es que yo sea optimista, es que lo que hago reporta beneficios casi inmediatos.
Impepineibol
En caso contrario, no cobramos (ya tardabas en hablar de pasta, dirás)
O sea, que perdemos nosotros.
Tú no pierdes nunca (OJO)
Como decía, no soy optimista, pero cuando le ofrezco a alguien ganar sin contrapartidas y sin riesgos y no se decide, me llevan los demonios
Y entonces pienso que hay algo que no estoy entendiendo bien.
Ni bien ni mal. Algo que no estoy entendiendo.
¿Y qué me pasó hace unas semanas que fue tan curioso? Pues eso mismo.
Que le digo a mi potencial cliente que le voy a ahorrar una pasta y nada: cri, cri, cri... (grillos, ya sabes)
Circulen, que aquí no pasa nada
Y yo le insisto: ¿No me crees?¿Qué es lo que no te encaja?
Y me dijo lo que pasaba. Resultó ser un tipo más listo que el hambre y él sabía por qué aquello no terminaba de encajarle.
Y me lo contó
Ojo al dato:
Me has dicho que me voy a ahorrar un dinero.
Imagina que viene un tío a tu casa y te dice que si lo contratas y le pagas 1000 €/mes te va a ahorrar más de lo que le pagas.
¿En qué piensas?
Pues yo pienso en que esos 1.000 €/mes los tendré que dejar de gastar en otras cosas en las que ahora gasto.
Me dirás que Netflix es basura enlatada, que me borre.
Que los planes de pago que tengo en algunas aplicaciones me ofrecen muy poco más que los planes gratuitos. Que me dé de baja
Que deje de fumar, que se me va el dinero, la salud y la vida con tanta ceniza.
Que beba agua del grifo que es más sana que los refrescos y las bebidas alcohólicas.
Que use menos el coche y así ahorro combustible, le hago un favor al planeta, hago ejercicio y me puedo ahorrar el gimnasio.
En definitiva, un compendio de todos esos consejos que dan los presuntos expertos para ahorrar: pon detectores de presencia para la luz, no pases la calefacción de 19ºC en invierno y abrígate más, no tires la comida y aprende estos menús de aprovechamiento.
¿Me sigues hasta aquí?
Y entonces no lo tengo claro. Muchas verdades, sí, pero yo no te necesito para eso. Lo sé hacer yo solo, sin necesidad de un Pepito Grillo que me cobre una pasta.
Y lo que me ofreces para la empresa lo veo igual, pero cambiando esas cosillas personales por otras de empresa.
REDOBLE DE TAMBORES AQUÍ: TRRRRRRRRrrrrrrrrrrrrrrrrrrr
Si tú me ofrecieras un ahorro sobre algo que estoy gastando ahora y que lo puedo comprar por menos dinero sin ver reducido en nada el alcance de lo que compro. Sin cambiar nada, sólo el precio.
Si me ofrecieras eso, sería tonto si no te dijera que sí ahora mismo.
¡Ostras, Pedrín! Que sería tonto me dijo. Tonto si no me contrataba.
Arrea
Que yo pensé que me había explicado bien y mira: Communication Breakdown, que cantaban los de Led Zeppelin. Canción 7 de su primer disco, por si te interesa recuperarla de golpe. Dale candela:
Pues claro que es eso lo que te ofrezco. Por eso no entiendo tus dudas.
Mis dudas son—dijo— que no has dicho eso. Sólo que me vas a ayudar a ahorrar.
Pues te lo digo ahora. Con pelos y señales:
Te gastas al año 200.000 € en gases industriales. Te ayudaré a que sólo gastes 160.000 € y te quedarán 40.000 € de alegría en tu cartera. ¿Ahora sí? Y de esos 40.000 me das a mí una pequeña alegría también. Entre un cuarto y media alegría.
Ahora sí, pero espera...
¿Quién me lo va a vender? El mismo que ahora, si es lo que tú quieres.
¿En qué condiciones? Las mismas que ahora, excepto el precio.
¿Por qué iba a hacer eso mi proveedor? Porque te lo digo yo.
DECÍA CHESTERTON QUE NO ES QUE NO SEPAMOS ENCONTRAR SOLUCIONES, ES QUE NO SABEMOS CUÁL ES PROBLEMA
¿Y TÚ?
¿Sabes cuál es tu problema?
Rellena el formulario y si no lo sabes tú, miramos a ver si lo podemos encontrar.